Jornada histórica para el piragüismo balear en los Juegos Olímpicos. Dos medallas de bronce conseguidas con apenas media hora de diferencia. Joan Toni Moreno, junto a Diego Domínguez en C2 500, y Marcus Cooper, formando parte del K4 500 junto a Saúl Craviotto, Carlos Arévalo y Rodrigo Germade, han vivido una jornada de ensueño tras completar una excepcional actuación en el estadio náutico de Vaires-sur-Marne, sede del piragüismo en los Juegos Olímpicos de París.
Joan Toni Moreno, palista del RCN Port de Pollença, y el madrileño Diego Domínguez han tenido que partirse el alma en un último esfuerzo titánico para conseguir el bronce tras mantenerse en cuarta posición durante prácticamente toda la prueba. Finalmente, ha sido la photo finish la que ha determinado qué canoas se llevaban las medallas de plata y bronce. Los chinos se llevaron el oro con más claridad pero el C2 italiano, el español y el ruso cruzaron la meta con una diferencia prácticamente imperceptible. Finalmente Moreno y Domínguez se llevaron el bronce, a pesar de que en un primer instante los jueces habían dictaminado por error que esa medalla se iba para el equipo húngaro que en realidad había quedado sexto. Explosión de alegría lógica para los españoles cuando solo segundos después se subsanó el error.
Moreno ha conseguido su primera medalla olímpica en su primera participación en unos Juegos Olímpicos tras una temporada absolutamente espectacular en la que consiguió su billete para París en mayo en la Copa del Mundo de Hungría. Un nuevo éxito también para el seleccionador nacional de canoa, Kiko Martín, que suma así nuevos triunfos para el equipo español de canoa, que entrena en el Lago Esperanza de Alcúdia.
